Presentación de Libertad navarra en sociedad
Libertate nafarra-Libertad navarra nace desde el seno de un amplio movimiento cívico que intenta recuperar la libertad y la dignidad de una sociedad y su Estado (NAVARRA) ambos conquistados. Se articula como partido político para servir de herramienta a los navarros y navarras, no solo de la Navarra reducida (CFN), sino de Navarra entera.
¿Qué o quién es Navarra entera?
Navarra entera corresponde a la denominación de esta sociedad libre, soberana e independiente, cuyas instituciones estatales propias – legislativas, ejecutivas y judiciales- funcionaron hasta la actual época contemporánea. Hoy, como consecuencia de las conquistas y particiones continuadas que padece, la sociedad navarra se halla partida en provincias, autonomías, regiones y departamentos, españoles y franceses, negada en su existencia de sujeto político soberano, subordinada a las sociedades española y francesa, titulares de los Estados conquistadores dominantes, minorizada en sus derechos y libertades, expoliada en su economía y en el dominio de la misma. La sociedad navarra, para salir de esta situación en que yace postrada, tiene la necesidad y el derecho a la recuperación de su identidad y de su Estado navarro, al mismo tiempo que la libertad, la soberanía y la independencia.
¿Desde cuándo está así?
Desde el siglo XIII Navarra ha sufrido una conquista militar continuada a la cual se sumó definitivamente desde el siglo XVI la conquista política, jurídica y social. No dejó Navarra de ser un sujeto activo en la política internacional hasta el XVII, y continuó siendo sujeto pasivo internacional hasta bien entrado el siglo XIX. Siglo XIX en el que la libertad de los Navarros es completamente coartada al suplantar los Fueros, Fueros e instituciones estatales propias protectoras de nuestra libertad e independencia.
Fruto de las conquistas se han levantado fronteras localistas que han hecho creer a la gente que son cosas distintas ser navarro, vasco o riojano, por ejemplo. Las mismas demarcaciones territoriales han jugado a favor de esto, levantando nuevas fronteras en función de los nuevos límites que la administración española o francesa imponía.
Es por ello que queremos que sea la sociedad quien, en libertad, decida cuáles han de ser los límites jurisdiccionales. Romper con la inercia que nos lleva a aceptar imperativamente lo que las guerras han decidido en lugar de lo que los ciudadanos han querido. Que Navarra sea lo que la ciudadanía quiera que sea, y no el resultado de la violencia y la conquista.
¿Por qué estamos así?
Entendemos que la sociedad navarra sufre una gran carencia de democracia y libertad, y que se la ha obligado a renunciar a su saber hacer político. Se le ha impuesto un modo de hacer política que no es el suyo, un modelo de administración que no es el suyo. Se permite a la ciudadanía disponer de un espejismo de decisión pero sólo en tanto en cuanto no se sobrepasen los límites establecidos. Y no se puede ir más allá. Después de 800-500 años de conquista continuada se le dice que lo que tiene es suyo, que llevan mucho tiempo haciéndolo. Sin embargo la inercia no quiere decir que uno quiera hacer eso que está haciendo. Salvar los papeles y hacer lo posible por sobrevivir no es vivir en libertad.
¿Qué queremos hacer?
Queremos recuperar nuestra Libertad. Conseguir que la gente vuelva a tomar las decisiones desde abajo y sea ésta la que le diga a quien esté en la administración lo que tiene que hacer. Dejar de estar a la espera de que nos digan cómo comportarnos, qué hacer o dejar de hacer. Que la ciudadanía navarra tome las riendas de su futuro y lo construya por sí misma. Queremos ser el instrumento de la sociedad navarra para participar en las instituciones suplantadoras y poder solucionar sus problemas cotidianos y no tan cotidianos. Somos por tanto el altavoz y no el origen del sonido. No le diremos a la gente qué tienen que hacer. Será la sociedad la que nos dicte la forma en que quieren que se solucionen los problemas y nos comprometemos a que eso se cumpla.
¿Cómo lo vamos a hacer?
Trabajando a nivel municipal. Fomentando el diálogo. Existe una gran carencia de diálogo y respeto entre diferentes. Hay que cortar de raíz con este problema y conseguir el respeto entre vecinos, sean de la ideología que sean, hablen el idioma que hablen y pertenezcan a una cultura u otra. Fomentando por tanto la libertad.
Decidir también qué problemas afectan a qué ámbito, para poder así tomar decisiones en consonancia, sea a nivel local, comarcal o nacional.
Procurar que sean las asambleas municipales las que elijan a aquellos que habrán de ir a instancias superiores a representar al municipio. Y así sucesivamente.